La reciente Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) ha dejado un impacto sin precedentes en la Comunidad Valenciana, afectando a un total de 65 municipios, según la Cámara de Comercio. Este fenómeno meteorológico ha afectado a regiones como L’Horta Sud, La Plana de Utiel-Requena, La Hoya de Buñol y otros, alcanzando a 845.371 habitantes, lo que representa el 31,8% de la población de la provincia.

Consecuencias económicas y sociales

Los informes revelan que los municipios más perjudicados, como Alaquàs, Albal, Aldaia, Alfafar y Algemesí, han enfrentado cortes de suministros esenciales como agua, gas y electricidad. Además, las infraestructuras han sufrido daños significativos, y se ha reportado la pérdida de mercancías y productos en almacenes y centros de distribución. Este desastre no solo ha afectado a la vida cotidiana, sino que también ha impactado a 54.289 empresas y 354.000 trabajadores en la región, lo que pone de manifiesto las repercusiones económicas de esta catástrofe.

Mobilización de recursos de emergencia

Las autoridades locales han activado planes de emergencia y movilizado recursos para ayudar a los afectados. Equipos de rescate y apoyo se encuentran trabajando en la recuperación de áreas inundadas y en la restauración de servicios básicos, mientras se evalúan los daños y se organizan acciones de ayuda.

La respuesta de la comunidad y la búsqueda de apoyo

Ante esta crisis, la solidaridad de los ciudadanos y la movilización de voluntarios son fundamentales. Se alienta a quienes deseen ayudar a los afectados a visitar este sitio web para colaborar en la recuperación de los municipios dañados y apoyar a las familias que lo han perdido todo. La comunidad valenciana se une en un esfuerzo conjunto para superar esta adversidad y comenzar el camino hacia la recuperación.